
Dicen que el dinero no puede comprar la felicidad pero da para comprar una bicicleta; y nadie va triste encima de una bici (por muy hecho polvo que vayas).

Dicen que el dinero no puede comprar la felicidad pero da para comprar una bicicleta; y nadie va triste encima de una bici (por muy hecho polvo que vayas).